Ahora sí, la jodida tristeza refleja la vacuidad de mi alma, encontré tu mirada en medio de esperanzas rotas... pero esta noche empieza de nuevo sentada en el piso del baño con lagrimas acariciando mis mejillas, con libros encerrados en una caja de cartón, con tu voz al otro lado de la puerta. No me quiero derrumbar de nuevo, pero lo estoy haciendo...
Te amo, y no quiero que los callos de mi corazón te raspen y me vi reflejada en tus ojos, me duele el azul; y quizá todo esto pase con cada segundo que anhele tu regreso, con cada letra que me dediques para abrazarme y no dejarme perdida en esta ciudad desconocida.
Mar (o la mitad de tí).
3 comentarios:
Hola. Yo aqui, viendo al sol brillar.
Te conozco y tienes más vidas que un gato, sobriviras...
Heyy Kika, andaba pensando en ti.
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